Sergi Quintela

Desde muy joven, me di cuenta de que el baloncesto no solo era un juego: era mi manera de expresarme, de desafiarme a mí mismo y de conectar con otras personas. De niño, me pasaba horas en la cancha, ya fuera solo, con mis amigos o con mi hermano, creando jugadas y soñando con ser uno de los grandes. Esa pasión por el juego, por mejorar cada día, nunca me abandonó, y fue lo que me llevó a dar el paso de jugar a nivel profesional.

Tuve la suerte de que mis primeros años en el baloncesto estuvieron guiados por una entrenadora excepcional, Cris Seijo, quien me enseñó mucho más allá de la técnica. Cris no solo me transmitió sus conocimientos sobre el baloncesto, sino que también me inculcó el valor de la disciplina, el respeto y la constancia. Sin su influencia y sin el ambiente tan especial de los entrenamientos con ella, no habría sido el jugador que soy hoy.

Otra parte fundamental de mi crecimiento fue la Pista Roja, el lugar donde pasé tantas horas de niño, jugando con mis amigos y perfeccionando mis habilidades de manera casi instintiva. Esa pista, aunque no era la mejor ni la más moderna, tenía algo especial. Allí entendí lo que es el baloncesto en su forma más pura, sin presiones, solo con la intención de disfrutar, aprender y mejorar.

Lo que más valoro en el baloncesto es el espíritu de equipo y la capacidad de adaptarse a los desafíos. He aprendido que cada momento en la cancha, ya sea un entrenamiento o un partido, es una oportunidad para evolucionar, para apoyarse en los demás y para aprender de cada situación. Mi objetivo en este campus es ayudaros a desarrollar esa mentalidad de equipo, a entender que en cada jugada hay una lección, y a motivaros a no rendiros, incluso cuando las cosas se pongan difíciles.

El baloncesto me ha enseñado que el éxito no se mide solo por los triunfos, sino por el esfuerzo constante y la actitud con la que se enfrenta cada desafío. Estoy aquí para compartir con vosotros no solo mis conocimientos técnicos, sino mi pasión por el juego y mi compromiso con cada paso del proceso. ¡Espero que podamos disfrutar juntos de este viaje y aprender unos de otros!

Trayectoria como profesional:

- Xuven Cambados (2014-2016)
- CB Breogán (2016-2018)
- Força Lleida (2018-2019)
- CB Breogán (2019-2024)
- CAB Obradoiro (desde 2024)

A los 18 años, a mitad de temporada, ficho en el Club Xuventud de Cambados, de la liga LEB Plata, club en el que milito durante la siguiente temporada y media, y coincido por primera vez con Erik y con Miguel Angel Hoyo, persona clave tanto en mi desarrollo personal como profesional.

En el 2016 doy el salto a la LEB Oro y cumplo uno de mis sueños, defender la camiseta del Breogan, quedándonos a las puertas de un ascenso a ACB que conseguiríamos la temporada siguiente, junto con la Copa Princesa.

Después del ascenso, el Breogán me cede al Club Força Lleida, de la LEB Oro, en un año de gran crecimiento deportivo para mí gracias al trabajo de Jorge Serna y su staff. Vuelvo a Lugo antes de terminar la temporada para jugar las últimas jornadas con el Breogán, debutando en ACB en abril de 2019. Tras un breve paso de nuevo por la Leb Oro con el conjunto lucense, con el que conseguí mi segunda Copa Princesa, ascendemos a la ansiada y competitiva Liga ACB. Por tercer año consecutivo, estamos rindiendo al máximo nivel y podemos presumir de haber disputado también, por segunda vez en la historia breoganista, una competición europea a un gran nivel.

 

Dejando la pelota a un lado, me encanta pasar tiempo con mi familia y amigos, y soy un gran aficionado a la lectura, a los videojuegos y a las Jordan.